Miles de trabajadores de Estados Unidos suspendidos por parálisis presupuestaria
Los republicanos de Estados unidos acusan a los demócratas de provocar el cierre gubernamental por falta de fondos.

El gobierno federal entró en un cierre parcial por falta de fondos.
AFP
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Actualizada:
01 oct 2025 - 10:27
El gobierno de Estados Unidos entró este miércoles 1 de octubre de 2025 en parálisis presupuestaria, con el consiguiente cierre de parte de la administración federal, sin una solución a la vista en el Congreso entre los republicanos del presidente Donald Trump y la oposición demócrata.
Es el primer cierre o "shutdown" desde el que ocurrió en 2019, el más largo en la historia (35 días).
Cientos de miles de empleados gubernamentales pertenecientes a departamentos y agencias federales deberán cesar de trabajar, sin derecho a sueldo.
Ni los cuerpos de seguridad federales ni las fuerzas armadas, así como tampoco el servicio postal o el pago de subsidios o jubilaciones, se ven afectados.
Trump culpó a los demócratas por el estancamiento y amenazó con castigar al partido y sus votantes con la interrupción de prioridades de la agenda progresista y recortes masivos en el sector público.
Wall Street abrió a la baja (-0,18%).
La Casa Blanca publicó en su cuenta en X un mensaje en el que afirmó que "los demócratas cerraron los servicios del Estado", con un reloj que cuenta la duración del "shutdown".
"Podemos hacer cosas durante el cierre que son irreversibles, que son malas para ellos (...) como despedir a una gran cantidad de personas, o cortar cosas que a ellos les gustan", dijo Trump el martes a periodistas en la Oficina Oval.
Gasto en atención médica
La amenaza de Trump de nuevos recortes de empleos se suma a la ansiedad en el personal federal causada por los despidos iniciados a gran escala del Departamento de Eficiencia Gubernamental (Doge) del exasesor presidencial Elon Musk.
En el portal de la NASA, un mensaje indica que la agencia federal "está actualmente cerrada a raíz de una interrupción del financiamiento gubernamental".
Varias embajadas estadounidenses anunciaron en X que no actualizarán informaciones salvo en lo concerniente a anuncios urgentes de seguridad.
La cúpula del partido opositor, sin embargo, se muestra reacia a un acuerdo por el momento.
Los líderes demócratas en el Congreso, el jefe de la minoría en el Senado Chuck Schumer y su homólogo en la Cámara de Representantes Hakeem Jeffries, afirmaron en un comunicado conjunto que "Donald Trump y los republicanos cerraron los servicios del Estado porque no quieren proteger la atención médica del pueblo estadounidense".
El vicepresidente, JD Vance, se declaró dispuesto este miércoles a negociar con los demócratas, pero "solamente después de poner en marcha de nuevo el Estado".
"No puedes recompensar la toma de rehenes", dijo.
El objetivo de los republicanos es extender el financiamiento actual hasta finales de noviembre, y negociar un plan de gasto a más largo plazo.
Pero los demócratas querían restituir cientos de miles de millones de dólares en gastos de atención médica, en especial en el programa de seguros de salud denominado Obamacare para hogares de bajos ingresos.
Costo en el PIB
Los republicanos acusan a los demócratas de querer mantener el nivel de gastos de salud que existía durante la pandemia del covid-19, y de camuflar servicios de atención básica a los migrantes ilegales dentro de esa gigantesca parte del presupuesto público.
Pese a la mayoría republicana en el Senado, el partido de Trump no controla todos los votos necesarios para aprobar leyes presupuestarias. Estas requieren 60 votos, siete más de los que tienen los republicanos.
Del lado demócrata ya aparecieron las primeras fisuras en la última votación en el Senado, cuando votaron a favor de mantener el gasto público tres demócratas.
Pero faltan aún cinco votos para asegurar la aprobación de este paquete presupuestario.
Tras el fracaso de una última votación el martes por la noche en el Senado, el director de la Oficina de Presupuesto en la Casa Blanca, Russell Vought, ordenó en una carta a las administraciones federales "poner en marcha sus planes para un cierre ordenado".
Según la Oficina de Presupuesto del Congreso (CBO), 750 000 funcionarios federales podrían encontrarse esta vez en situación de desempleo parcial, con una pérdida de ingresos equivalente a 400 millones de dólares.
Según los cálculos de los analistas de la compañía de seguros Nationwide, cada semana de cierre podría reducir el crecimiento del PIB de Estados Unidos en 0,2 puntos porcentuales.
El último cierre, durante el primer mandato de Trump, duró 35 días. En ese momento, la CBO estimó que había reducido el Producto Interno Bruto (PIB) en 11 000 millones de dólares.
El gobierno federal ha cerrado parcialmente 21 veces desde 1976, cuando el Congreso promulgó el proceso presupuestario moderno.
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