¿Qué es la variante Frankenstein del Covid-19 y cómo afecta al Ecuador?
La variante XFG proviene de la mezcla de dos sublinajes de la variante ómicron: LF.7 y LP.8.1.2.

La ‘variante Frankenstein’ del covid representa un riesgo bajo según la OMS
Inspi
Compartir
Actualizada:
04 oct 2025 - 10:00
El Ministerio de Salud Pública (MSP), a través del análisis de vigilancia genómica realizado por el Instituto Nacional de Investigación en Salud Pública (INSPI), detectó los primeros casos en Ecuador de la variante del virus del SARS-CoV-2 denominada XFG, considerada de riesgo bajo para la salud pública.
Según las autoridades en el país los hospitales reportan de un aumento de hasta el 40% de enfermedades respiratorias, entre ellas un rebrote de Covid-19 y el alza se atribuye a la variante XFG.
¿Qué es la variante XFG?
El nombre científico de la llamada variante Frankenstein es XFG, también conocida como Stratus. Es un linaje recombinante: surge cuando dos variantes coinciden en un mismo huésped y combinan parte de su material genético.
En este caso, XFG proviene de la mezcla de dos sublinajes de ómicron: LF.7 y LP.8.1.2.
La Organización Mundial de la Salud (OMS) la incorporó como variante bajo monitoreo el 25 de junio de 2025, tras detectarse la primera muestra en enero de 2025. Esto significa que requiere vigilancia, pero no hay pruebas concluyentes de que represente un mayor riesgo.
Lo que se conoce de la variante
Según la Organización Mundial de la Salud (OMS), la variante XFG se ha identificado en más de 35 países. No obstante, su distribución es desigual: en muchos lugares sigue siendo minoritaria.
La OMS estima que XFG podría transmitirse algo más rápido que otras variantes, pero esto no implica automáticamente más gravedad o ingresos hospitalarios.
Algunos medios han destacado un posible signo diferencial: la ronquera o voz áspera. Los estudios publicados en The Lancet Infectious Diseases e Infectious diseases, así como un estudio en fase de prepublicación, coinciden en que no se han identificado síntomas diferentes a los de variantes recientes.
Los datos preliminares indican que las vacunas actuales, especialmente las basadas en JN.1 (la subvariante de ómicron dominante en 2024), siguen protegiendo frente a XFG.
Compartir